Residir estáticos.

Hasta la propia piedra, estática allá donde la coloques, tiene miedo de los cambios que pueda haber a su alrededor.

No seas piedra, sé aquello que gracias al impulso del aire, a la fuerza de la caída y esos otros factores que segmentan esa piedra.

No te quedes esperando que pase, sé el cambio. 

No te quedes esperando que él/ella te lo diga, ve tú a decírselo.

No te quedes con ese te quiero ahí guardo, aunque no caduquen...

No te quedes esperando que suene y haz esa llamada.

No seas piedra estática e intenta, con seguro mucho trabajo, ser el cambio oscilante que tu vida desea hasta que encuentre su lugar donde residir estático.

 

Joaquín Cruz Romero.
.
Apoya esta publicación con tu ❤️ y compártela en Instagram / Twitter: @misletrasytu 

Comentarios

Entradas populares